Calcular qué potencia eléctrica necesita tu negocio es determinante para no abonar de más en la factura de luz. La potencia eléctrica es un elemento clave a la hora de optimizar tu tarifa de electricidad. Una potencia mal calculada puede suponer sobrecostes anuales elevados o, todo lo contrario, un ahorro considerable si contratas una adecuada.
Si tienes una empresa o negocio no olvides revisar tus tramos de potencia contratados, al menos una vez al año, y si es necesario plantéate cambiar la potencia eléctrica contratada. Ahorrar a final de mes en una pyme, u optimizar la potencia contratada, es posible si sabes cómo.
¿Qué potencia eléctrica contratar en mi negocio?
Definir la potencia a contratar en una pequeña o mediana empresa es fundamental, ya que, como decimos, puede suponer un gasto enorme o, por lo contrario, un fuerte ahorro en la factura de luz.
La potencia contratada en una pyme puede ser igual a la de una vivienda, es decir, inferior a 10kW, o entre 10 y 15kW e incluso superior. No existe una potencia eléctrica determinada para pymes, y es que cada negocio tiene unas características y condiciones diferentes. Sin embargo, a continuación, puedes hacerte una idea aproximada de cuáles son las potencias más demandadas en los siguientes tipos de empresas, sin tener en cuenta su volumen de negocio:
Pyme – Potencia contratada
- Restaurante – Superior a 15kW
- Peluquería – 5kW (depende de la calefacción y agua caliente)
- Centros de formación - 5kW
- Tienda de alimentación – 5kW
Las pymes con una potencia contratada superior a 15 kW, contarán en su instalación eléctrica con un maxímetro. Este dispositivo medirá tanto el consumo realizado como la potencia demandada en cada periodo. La principal característica es que, a pesar de medir un exceso de potencia, no cortará nunca el suministro eléctrico.
¿Cómo calcular la potencia necesaria en una pyme?
La mejor fórmula para calcular qué potencia eléctrica necesita tu negocio, se basa en una serie de elementos, que son:
- Dimensiones del local u oficina.
- Actividad económica del negocio o pyme.
- Número de trabajadores.
- Número de electrodomésticos.
- Porcentaje de aparatos eléctricos que van a funcionar de forma simultánea: éste es uno de los elementos más determinantes a la hora de calcular la potencia contratada. Con la ayuda de un técnico especializado podrás calcular el porcentaje de simultaneidad, precisando cuántos aparatos coinciden y durante cuánto tiempo.
Recomendaciones para cambiar tu potencia eléctrica
La potencia contratada de un negocio o pyme puede modificarse al alza o a la baja, si las circunstancias así lo requieren. Eso sí, es fundamental que cualquier cambio se realice exclusivamente tras el asesoramiento de un técnico especializado, para garantizar que la modificación no suponga ningún problema para el correcto desarrollo del negocio.
Antes de modificar la potencia eléctrica, cabe destacar que las distribuidoras eléctricas solo permiten hacer un cambio de potencia al año. Por ello, es necesario asegurarse de que el número de kilovatios es el correcto.
Lo dicho: tú decides la potencia que contratas, y tienes la última palabra. Pero tal y como comentamos, debes hacerlo con cabeza y sin apresurarte.
- Subir la potencia: existe un límite marcado por razones de seguridad, ya que no todas las instalaciones eléctricas soportan potencias elevadas. Si necesitas más de lo que tu límite permite, tendrás que renovar la instalación.
- Bajar la potencia: ten en cuenta que si te quedas corto de potencia serás tú quien sufrirá las incomodidades.
Sea cuál sea tu tarifa de luz, tu negocio o tu consumo habitual, la potencia eléctrica contratada te supone un coste fijo en tu factura; es decir, que lo tienes que pagar sí o sí aunque no tengas consumo. Por ello, es lógico que si reduces esa cifra, ahorres a final de mes, ¿verdad?
Para alcanzar ese objetivo final, desde Barraqueta Montajes Eléctricos queremos reseñar la importancia de dar con una compañía eléctrica en quien confiar y que sepa asesorarte de forma eficaz y veraz. Es fundamental que te indiquen cuál sería tu potencia contratada ideal.