Esta pregunta es realmente vital para el mantenimiento de tu electrodoméstico y para la salud de tu familia. Cada vez más neveras cuentan con un termómetro y un sistema de regulación automática de humedad y temperatura, las llamadas neveras inteligentes. Sin embargo, estos modelos de neveras inteligentes se están implantando muy poco a poco por su elevado coste.

Seguramente en unos años se democratice su uso; mientras, la mayoría de neveras que encontramos ahora mismo en el mercado tienen un sistema de regulación manual (con rueda) o digital (selección por números digitales). En los dos casos es necesario saber cómo configurar la temperatura de la nevera, es decir, qué número de frío es el adecuado. En este artículo encontrarás todo lo que necesitas saber para mantener tu nevera en la temperatura correcta.

Ventajas de una adecuada temperatura en la nevera

La nevera es prácticamente el único electrodoméstico que funciona todo el día, durante todos los días del año. Por ello, es necesario saber cuál es la temperatura apta para evitar una gran cantidad de inconvenientes que pueden perjudicar no solo tu bolsillo, sino también la salud de los tuyos. Una correcta temperatura en la nevera te permite:

Ahorrar en la factura de la luz

Conocer la temperatura correcta de la nevera y regularla apropiadamente, hará que ahorres en tu gasto mensual de luz. Tanto los altibajos de temperatura como tener una temperatura por encima o por debajo de la adecuada, presentará un extra de energía para la nevera. Por ello, lo mejor es evitarlo y establecer la temperatura exacta.

Conservar mejor los alimentos para que duren el mayor tiempo posible frescos y jugosos

Los alimentos necesitan del frío para conservarse. Un alimento sin frío no resistiría ni un día, sobre todo en verano, pero en la nevera puede aguantar varios días. Por esto, la nevera está equipada con distintas baldas y cajones.

Estos elementos no se incluyen por azar, sino que los propios fabricantes de frigoríficos ubican estos cajones y estantes para colocar unos alimentos determinados en función de sus necesidades de conservación. En el interior de las neveras, suele haber dibujos que indican el mejor lugar para guardarlos. Si ese no es tu caso, estate atento porque en otro post te explicaremos cuál es la mejor colocación de tu compra.

Evitar cualquier enfermedad producida por la mala conservación de los alimentos

Una correcta temperatura de la nevera previene que se generen bacterias realmente dañinas, que pueden provocar intoxicación alimentaria. Por ello, cuidar de la temperatura de tu nevera es sinónimo de prevención de muchas enfermedades: si tus alimentos se encuentran en las mejores condiciones posibles, también lo estará tu familia.

¿Cómo detectar que tu nevera tiene una temperatura inadecuada?

¿Quién no ha tenido la experiencia de limpiar una nevera con escarcha?, ¿quién no ha tirado fruta o verdura antes de tiempo porque ya tenía moho? Cuando descubres alimentos en la nevera que se encuentran congelados, en mal estado, con moho en algunas zonas o simplemente con un mal aspecto mucho antes de lo esperado, es necesario revisar la temperatura de la nevera.

Estos son las consecuencias más frecuentes de una incorrecta temperatura. Quédate leyendo para descubrir cómo evitar estas engorrosas situaciones de una forma muy sencilla: controlando la temperatura de la nevera.

¿Cuál es la temperatura adecuada?

La nevera es un electrodoméstico que funciona a base de regular la temperatura del aire que se encuentra en su interior, es decir, la nevera no enfría los alimentos, sino que enfría el aire interior, provocando una temperatura con la que se conserva tu compra.

Según la Agencia de Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, la temperatura ideal del frigorífico es de 4 grados, mientras que la temperatura ideal del congelador es de -18 grados.

Contando con que las neveras suelen tener del 1 al 5 como números para regular el frío, lo recomendable sería configurar la nevera en el número 3 o 4, dependiendo de la potencia de la misma. Estos son los grados adecuados para que se conserven tus alimentos y también son los grados en los que la nevera puede mantener su actividad de forma continua sin hacer un sobre esfuerzo.

Consejos para conservar la correcta temperatura de la nevera

Entonces, ¿qué se puede hacer para mantener esta temperatura? Aquí van una serie de consejos para que tu nevera cuide de tus alimentos y mantenga su salud:

No llenes la nevera en exceso: una gran cantidad de comida provoca que no circule el aire interior. Esto genera humedad, de la que salen hongos y bacterias. Una nevera bien ordenada es el secreto de una comida fresca y de un frigorífico sano.
No metas alimentos calientes: lo mejor es esperar a que se enfríe esa comida, taparla con film transparente o guardarla en tupperwares. Una comida caliente que entra en la nevera provoca una descompensación de temperatura, porque la nevera, a 4 grados, recibe un alimento a 25 o 30 grados. Ante esta situación, el frigorífico tiene que realizar un sobre esfuerzo, caro, innecesario y perjudicial para el resto de alimentos. ¡Recuerda!: es mejor dejar enfriar la comida un poco antes de meterla en la nevera.
Abre la nevera solo para lo necesario: un buen hábito es pensar qué comida vamos a tomar antes de abrir el frigorífico. Así la nevera se mantiene abierta solo lo imprescindible, conservando mejor el frío.
Activa la opción super fresh: algunas neveras, sobre todo las digitales, tienen la opción super fresh, que permite disminuir la temperatura interior unos pocos grados, para que cuando coloques tu compra, tarde menos en enfriarse y la nevera pueda recuperar antes su temperatura correcta. Además de darle una ayuda a la nevera para regular su temperatura, la activación del super fresh no supone un aumento considerable en el recibo de la luz. ¡Pruébalo!

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